[Noticia perteneciente a la sección: COMERCIALIZACIÓN Y CONSUMO]
El consumo de Aceites de Oliva, al igual que el de otras grasas vegetales tiene una tendencia a reducirse en los Hogares Españoles, hecho que también se ha notado en los otros principales países productores de este zumo de aceituna como Italia y Grecia, siendo cuantificado entre 1.000.00 t o, según mis propias cuentas, en 700.000 t. Estemos más cerca de una u otra cifra, es preocupante para el sector esta pérdida de demanda interna. Es vital el consumo interno de Aceites de Oliva, pues la mayor cantidad del consumo tiene lugar en los propios países productores. Este problema se ha hecho más patente esta campaña, en la que la exportación a nuevos países consumidores no ha absorbido esta baja de consumo y ha habido una campaña récord en España.
En el Centro Tecnológico Nacional Agroalimentario llevamos muchos años haciendo una monitorización del consumo de grasas vegetales y aceites de oliva, hecho que ha generado varias publicaciones, cuya última publicación se envió al Simposium internacional de Expoliva (mayo, 2019) y que fue seleccionada para una comunicación oral. Sin embargo, no solo basta con anotar este cambio en la conducta del consumidor de los aceites de oliva (homogenización de la compra todo el año, aumento de productos de alto valor añadido, mayor venta de vírgenes frente a aceite de oliva refinado, reducción del consumo de 1 L, mantenimiento del girasol…) sino transmitir al sector que el problema de ventas no está en la góndola de los aceites (yo hablo de dos dimensiones, el alto y la longitud de la góndola), sino en todo el supermercado (problema en tres dimensiones, alto y longitud de todas las góndolas), pues el consumidor está cambiando su forma de consumir.
¿acaso no ha cambiado nuestra forma de comprar en los últimos 10 años? ¿no han cambiado los teléfonos, las relaciones sociales…? Han cambiado las personas responsables de las compras, quienes antes eran hogares con niños ahora son hogares de adultos independientes porque se han separado con el hijo estudiando fuera de casa. Todo esto se nota en la compra.
Y como entremos en cómo ha cambiado la distribución, su concentración, el auge de la Marca del Distribuidor (Marca Blanca), la distribución ha ganado mucho poder de negociación frente a sus proveedores….y así se podrían anotar muchas más cosas.
A partir de los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Hay dos tipos de fuentes: privadas, a las que les paga por los datos de consumo, empresas especializadas en conocer lo que compramos cada vez que pasa el producto por el lector; y datos públicos, gratuitos. Cada fuente tiene sus cosas positivas y negativas, entre las que destacaría la exactitud por la población que se estudia y el tiempo (datos recientes frente a datos “del pasado” para ver el futuro). En CTAEX empleamos los datos del MAPAMA, en los que mensualmente analiza más de 550 productos y grupos de alimentos, por perfiles, lugares de compra, CC. AA…, lo que nos da mucha información que no siempre es fácil digerir y desgranar. En ello estamos ahora, en identificar grupos de alimentos clave para conocer qué ocurre en nuestros hogares.
CTAEX está analizando los último 11 años de consumo en los hogares, con más de 550 referencias, y a falta de completar los datos de 2019 para tener una mayor cercanía a lo actual, se pueden sacar las siguientes anotaciones de interés:
- En España somos 46.733.038 habitantes, en 2018 se rompe la racha de descenso poblacional y vuelve a subir la población.
- El número de hogares aumenta por 4 año consecutivo, con 18.465.718 hogares, lo que nos da una media de 2,5 personas por hogar. Suben el número de hogares, sobre todo los de menor tamaño de personas.
- El español medio gasta en alimentos y bebidas 2.526,28 € comprando 767,9 kilos-litros de alimentos, de los que destina a sus casas 1.497,08 € para adquirir 629,7 kg L.
- De esos 1.497,08 € solo destinamos a grasas, entre las que está los Aceites de Oliva, 34,51 €, el 2,3% de nuestro presupuesto en la mejor grasa nutricional que existe.
Principales aspectos
Productos que bajan su consumo:
- Productos Tradicionales como la morcilla, productos derivado de sangre, la leche cruda, el chorizo (de 1,11 a 0,95 kg per cápita) o incluso el salami/salchichón de 0,52 a 0,42; También hay un descenso estadísticamente significativo del jamón, aunque habría que ver qué tipos fluctúan más; las alubias son las únicas legumbres que ven reducido su demanda en beneficio de los garbanzos.
- Lo que requiera un cocinado complejo, como el rape, las sardinas que pasan de 0,66 a 0,52 kg p.c., calamares o pulpo (de 1,55 a 1,27 kg). El Pescado en general, que baja de 26,83 kg p.c. a 24,12 kg pc; baja incluso el pescado congelado (3,25 kg a2,57 kg).
- Comemos menos carne, pasamos de 52,82 kg a 48,02 kg p.c. Es conocido que baja el Ovino y caprino, de 2,07 kg p.c. a 1,50 kg p.c.; la carne vacuno baja de 6,56 kg a 5,24 kg; el cerdo pasa de 10,86 kg a 10,31 kg pc.; incluso el pollo por piezas baja o entero.
- En general baja el consumo de aceite/grasas de 13,25 a 12,66 L p.c.; Pero el que más el Aceite 1 L de 8,48 L a 6,44 L p.c., baja un 20% (1,6 kg) se pierde; sube los aceites de alto valor añadido envasados en formato diferente de 1 y 5L, pasando de 0,80 a 2,05 L p.c; baja los “aceites de oliva” pasando de 9,54 a 8,51 L p.c.; En el caso de los “aceites de oliva” (aceite de oliva virgen extra, aceite de oliva virgen, aceite de oliva mezcla de refinado con virgen) baja el que más Oliva (mezcla refinado+virgen), pasando de 5,93 L a 4,23 L
- Hay un descenso de Frutas (“tradicionales”) como la pera, 6,94 kg a5,18 kg p.c., la ciruela de 1,76 a 1,21 kg p.c., el melocotón de 1.34 a 0,59 kg p.c. (estas dos importantes en nuestra región), la manzana de 11,89 kg a 10,06 kg; aunque se está viendo un aumento de las “exóticas” (kiwi) y las de IV gama.
- Hasta la fruta en conservada en almíbar baja, de 1,09 a 0,90 kg
- Las hortalizas frescas también se observan una importante reducción, pero no con diferencias estadísticamente significativas. Destaco las judías verdes baja de 0,78 kg a 0,66 kg.
- Baja el consumo de leche, de 75,06 L p.c. a 70,94 L p c., sobre todo las enriquecidas con vitaminas de 6,42 a 3.17 L pc
- Yogures de sabores bajan de 2,35 a 2,04 kg p.c.
- Tomate natural baja (en lata), de 1,65 a 1,47 kg p.c.
- La lechuga-endivia fresca baja pasa de 4,76 a 3,64 kg p.c.
- El único plato preparado congelado que no sube son los de pescado.
- Hasta la sal baja de 1,28 a 1,15 kg pc, indicativo de que no cocinamos
- Comemos menos pan, pasamos de 35.93 a 33,02 kg pc., solo subiendo el industrial como te marco más abajo
Productos que suben su consumo:
- El fuet, al adaptarse a nuevas formas de consumo, al picoteo, o jamones cocidos light en detrimento de otros jamones cocidos y otros embutidos.
- El arroz, y dentro de los tipos los englobados en otros tipos de arroz ¿por exotismo? Sube de un consumo medio de 0.29 kg p.c. a 0,42 kg p.c.
- Platos precocinados de arroz, tanto congelado (de 0,35 a 0,41) y en conserva de 0,02 a 0,14. En total suben 0,18 kg p.c.
- Panes industriales secos pasan de 1,57 a 1,79; Panes industriales enriquecidos de 1,08 kg a 1,89 kg
- Platos precocinados congelados de 2.49 a 2.55 kg p.c., tan solo un 2%
- Si baja la leche pero sube la Leche evaporada de 0,04 a 0,11 kg, crece un 35%.
- La Pasta en general de 3.82 a 4.12
- “Otras salsas”, diferentes a las convencionales (kétchup, mayonesa, mostaza) pasamos de 0,57 kg a 0,87 kg (un incremento del 52%, y tendencias a aumentar, pues el total de salsas pasan de 2,23 kg a 2,61 kg p.c., pero suben 0,3 kg p.c. por las nuevas salsas.
- De los pescados el que sube es el Bacalao fresco sube de 0,47 a 0,64 kg, aumenta un 35%. Hay otra tendencia de subida pero no significativa aún.
- Sube la carne de pollo en filetes, de 0,86 a 1,75 kg p.c., la única de mayor consumo.
- La carne fresca que sube es la ibérica (0,13 a 0,37 kg pc), aunque es poco pero ello ya ha sido detectado por la industria con ofertas muy dirigida a un perfil de consumidor.
- La patata procesada (incluye las prefritas congeladas) sube de 1,23 kg p.c. a 1,34 kg p.c.
- Los platos preparados pasan de 11,93 kg a 14,08 kg, un crecimiento de 2,1 kg en 6 años.
- Platos preparados en conserva de 1,36 a 1,70 kg pc, sopas y cremas de 4,26 a 5,15 kg p.c., las pizzas de 2,07 a 2,39 kg pc, y las bases de pizzas de 0,49 a 0,62 kg p.c.
- Especias y condimentos de 1,05 a 1,27 kg pc, y los vinagres pasan de 0,91 L pc a 0,99 L pc
- Las Legumbres han mantenido bien su consumo, destacando que las cocidas (las de bote) aumentan de 1,42 a 1,57 kg p.c. en detrimento de las secas.
- Suben los garbanzos, pero los cocidos ¿ensaladas? De 1,21 a 1,27 kg.
- La tortilla refrigerada aumenta de 0,20 kg pc a 0,33 kg p.c.
- Suben los helados, pasando de 2.43 kg a 2,91 kg p.c.
- Agua envasada sube de 50,50 L a 59,68 L p.c.
- Suben ligeramente las aceitunas de mesa, pasando de 0,33 kg a 0,42kg p.c. las sin hueso y con hueso de 0,48 a 0,57 kg p.c. Ello hace que suban todas las aceitunas de 2,26 kg a 2,54 kg p.c., aspecto positivo para el sector olivarero.
Todo esto permite concluir que:
- Cocinamos menos, incluso cuando vamos a salir fuera ya no nos llevamos la comida, preferimos comprarla.
- Cae también el número de platos que comemos, solemos hacer solo uno.
- Cambia los hábitos de preparación: a la plancha, frío sin cocinar, hervido. Lo que menos el rebozado y el microondas. Baja lo frito, el uso del horno, aunque se mantiene el guisado. Buscamos cosas fáciles de cocinar.
- ¿Cuál es el plato estrella? La ensalada verde (10 ocasiones al año), pizza (5,5 veces), ensalada de tomate, pollo a la plancha, lenteja, sopa de pasta, macarrones…
Como última anotación me gusta comparar la compra de aceite, lo que invertimos, eso escasos 35 € por persona y año, con la cantidad de cervezas que tomamos fuera de casa, la cual asciende a casi 30 L por persona y año, casi 0,9 L de cerveza por euro invertido en aceite.