Fecha de publicación:
02/12/2024
Fuente: El Correo del Vino Lugar:
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HISTÓRICAMENTE BAJA
La producción internacional de vino alcanza un nuevo mínimo en 2024, con las previsiones de la OIV que esperan una caída del 2% en comparación con una cosecha de 2023, que ya era más débil que nunca. Las esperanzas de revalorización de los mercados se expresan, pero aún no se están materializando, a falta de tensión en la demanda y los mercados.
En 2024, el mundo produciría 231 millones de hectolitros de vino según las estimaciones presentadas el 29 de noviembre por la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV). Una producción que disminuyó un 13% con respecto a la media decenal y del 2% en comparación con 2023, que ya era una cosecha históricamente baja, nunca vista desde 1961 (220 millones de hl). “Las condiciones meteorológicas adversas observadas en ambos hemisferios son una vez más en gran medida responsables de la reducción del volumen de producción mundial”, señala la OIV, evocando “heladas tempranas, fuertes precipitaciones y sequías prolongadas”, pero también señalando una “tendencia exacerbada por las circunstancias económicas y de mercado”, entre el arranque de la vid y el desconsumo de vino que se plantean a todos los del vino.
Registrando el mayor descenso de la producción (-23% con -10,9 millones de hl, para caer a 36,9 millones de hl como en 2021), Francia cede el puesto de primer país de producción mundial a Italia (41 millones de hl, +7%), y España sigue siendo tercero (33,6 millones de hl, +18%). Cuarto país productor del mundo, Estados Unidos cae a 23,6 millones de hl (-3%). Más allá de las clasificaciones de producción, el reto para el sector del vino es mejorar estos pequeños rendimientos relanzando la comercialización. Con “un segundo año consecutivo de producción reducida, en un contexto de disminución del consumo mundial y altos niveles de inventario, podría ayudar a equilibrar el mercado al mitigar el impacto económico inmediato de la reducción de la producción para ciertas regiones o productores”, esboza la OIV.
No podemos hacer como si nada hubiera pasado
Un reequilibrio de oferta de demanda que está lejos de verse actualmente en los contratos de compra de vino a granel. “El punto primordial actualmente, con las negociaciones comerciales, es evitar el precio de depredación de ciertos comercios y de la gran distribución. No podemos perder 10 millones de hectolitros de producción nacional y hacer como si nada hubiera pasado», se molestó recientemente Jérome Despey, presidente del consejo especializado en vino de FranceAgriMer, que pide «integrar los costes de producción en los precios pagados a los productores y evitar los precios abusivamente bajos. Hoy no es decente. Por mucho que encontremos los mejores dispositivos de apoyo, la solución será un precio remunerativo. »
La producción mundial de vino (excluyendo zumos y mostos) de 2000 a 2024 por la OIV
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