El análisis del suelo, una herramienta clave para mejorar la productividad de las cosechas

Fecha de publicación: 17/04/2024
Fuente: Extremadura XXI
Lugar: agricultura
Se recomienda realizar el muestreo de tierra con 1 o 2 meses de antelación al establecimiento del cultivo



Conocer el suelo agrícola donde vamos a plantar un cultivo leñoso o un cultivo de temporada es esencial para lograr una buena producción en cantidad y calidad. Al igual que las personas se hacen análisis de sangre de forma periódica para detectar posibles anomalías en el funcionamiento del cuerpo, los análisis de suelo resultan de gran utilidad.



Según Miguel Ángel Domene, responsable del Área de Alimentación y Salud de Cajamar, “los análisis de suelos proporcionan información sobre las propiedades físicas, químicas y biológicas de los mismos, constituyendo una herramienta necesaria para un correcto manejo de los cultivos.



La utilidad de estos análisis se basa en diversas razones fundamentales: aportar la dosis adecuada de fertilizantes, lo que se traduce en un ahorro de fertilizantes y, por tanto, un ahorro económico, pero también, y no menos importante, una reducción del impacto ambiental, evitando la acumulación y contaminación innecesaria que provoca el exceso de abonado. Para evitar deficiencias por falta de un nutriente en concreto o por desequilibrios nutricionales, aumentar la productividad y la calidad de las cosechas, como consecuencia de una fertilización ajustada y equilibrada”.  



Una analítica de suelos consta de varias fases bien diferenciadas: toma de muestras en campo; determinaciones analíticas en laboratorio; interpretación de resultados y la elaboración de recomendaciones a la vista de los resultados.



Toma de muestrasSegún el informe presentado por la Fundación Cajamar, “para la correcta interpretación es fundamental hacer un muestreo correcto del que podamos extraer la máxima información. La toma de muestras constituye el primer paso de un análisis químico de suelo, y el más crítico, ya que se constituye como la fuente de error más común. 



Para Miguel Ángel Domene, “antes de comenzar el muestreo de suelos es de vital importancia haber definido con anticipación las ‘unidades de muestreo’, es decir, zonas o áreas con características homogéneas o similares en cuanto a topografía, vegetación, especie cultivada, sistemas de cultivo y manejo del suelo, características físicas (textura y color), profundidad de suelo, drenaje, etc.; realizando o analizando tantas unidades de muestreo como sean necesarias en función de las características de la parcela”.



Elegir bien la fecha en la que realizar el muestro también es muy importante. En general, se recomienda realizar el muestreo con 1 o 2 meses de antelación al establecimiento del cultivo. De esta manera hay tiempo para obtener los resultados, interpretarlos, establecer las recomendaciones y adquirir los fertilizantes y mejoradores de suelo, y así, poder implementar un programa óptimo de fertilización. 



En función del tipo de cultivo, hay algunas fechas recomendadas para realizar el muestro de suelo: 



-Cultivos hortícolas de verano: desde su cosecha hasta antes de su implantación, a ser posible con un tiempo de dos meses de antelación a la plantación, para así poder aplicar soluciones en caso de identificar problemas.



-Cultivos hortícolas de invierno: hasta dos semanas antes de su siembra/plantación.



-En huertos de frutales el muestreo debe realizarse antes de la primavera, para decidir el programa de fertilización antes de la brotación. Si las condiciones de tiempo lo permiten, el muestreo se puede realizar antes de la labranza, en caso de realizarla.



-Olivar, viñedo, pistacho e higuera: siempre tras la cosecha. 



-Cítricos, de noviembre a enero, habiendo transcurrido como mínimo 1 mes desde el último abonado. 



En el caso de plantaciones frutales, cítricos, viña y olivar, es imprescindible un primer análisis de suelo antes de la plantación, para la correcta elección de los portainjertos y del abonado de fondo. No se debe muestrear después de aplicar fertilizantes o encalar, ya que alteraría el resultado de las analíticas, teniendo que transcurrir, como mínimo, 1 mes desde la última aplicación y la toma de la muestra. 



Las propiedades de suelo a determinar en este estudio pueden ser: carbono orgánico; ácidos húmicos, fúlvicos y huminas;  nitrógeno total ; nitrógeno inorgánico; fósforo asimilable;  azufre asimilable;  micronutrientes; cationes de cambio;  capacidad de intercambio de cationes y  pH en extracto saturado.