Fecha de publicación:
29/03/2024
Fuente: El País
La intoxicación de dos personas en la Comunidad de Madrid por consumir galletas y gominolas con un derivado del cannabis entre sus ingredientes ha provocado que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) haya retirado en los últimos días lotes de productos de al menos dos marcas procedentes de la República Checa y los Países Bajos. Las autoridades españolas también han activado sendas alertas en el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF, en sus siglas en inglés) para dar a conocer los hechos a los demás países de la Unión Europea (UE).La primera alerta fue activada por la AESAN el pasado viernes día 22. Según el sistema RASFF, que considera el evento “grave”, dos personas resultaron intoxicadas tras consumir galletas y gominolas procedentes de la República Checa. Las dos requirieron asistencia médica al sufrir “síntomas neurológicos (vértigos y mareos) y vómitos”, según la alerta. Los análisis realizados revelaron que los productos, que también habían sido distribuidos en Portugal, contenían hexahidrocannabinol (HHC), información que ya figuraba en el etiquetado.El HHC es un derivado natural del cannabis —también se produce sintéticamente— que se encuentra en bajas concentraciones en partes de la planta como el polen o semillas, entre otras. Tiene unos efectos parecidos al tetrahidrocannabinol (THC), que es el principio activo más importante de la marihuana, y que se caracteriza por causar en el consumidor una sensación de relajación, desinhibición, alegría... entre otras.Aunque la normativa europea no permite la venta de estos productos si su seguridad no ha quedado acreditada por Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), no es difícil encontrarlos en el mercado gracias a las grietas que deja la normativa, a la venta por Internet y al uso de canales más o menos informales de distribución y venta.“Las intoxicaciones por cannabinoides que vemos en urgencias son casi siempre por comer este tipo de productos. Es muy raro que atendamos una intoxicación aguda en personas que han fumado. Vemos a gente que ha probado unas galletitas que parecen inocentes o que las han hecho ellos mismos en casa. La razón es que así es difícil calcular las dosis consumidas y muy fácil acabar tomando cantidades elevadas de estas sustancias”, explica Emilio Salgado, de la Unidad de Toxicología del Servicio de Urgencias del Hospital Clínic (Barcelona).“Los pacientes pueden presentar síntomas gastrointestinales, aunque los más frecuentes e importantes son los cuadros de agitación, ansiedad, alucinaciones, alteración de la conciencia... El tratamiento suele ser sintomático: estar en un lugar tranquilo hasta que pasen los efectos, benzodiacepinas si es necesario... Son cuadros que pueden resultar muy desagradables para la persona que los sufre, aunque lo más habitual es que remitan en unas horas sin mayor gravedad”, añade Salgado.La AESAN publicó el mismo día 22 un comunicado en el que informaba de la retirada., aunque no de los dos intoxicados. En el texto se precisaba que había sido la Comunidad de Madrid la que había detectado los productos y que los retirados eran “Cookies HHC y Gummies HHC de la marca Weed Nation”. La Agencia destaca que “su consumo implica un riesgo grave para la salud” y hace un llamamiento “a las personas que tengan en su domicilio productos afectados por esta alerta, se abstengan de consumirlos”. Este tipo de artículos pueden comprarse en algunas tiendas y a través de Internet.Curiosamente, y aunque las galletas y gominolas están empaquetadas de forma similar a productos de este tipo (incluso indican la fecha de caducidad), los envases contienen en su etiquetado mensajes que afirman que no son aptos para el consumo. “Producto técnico o en investigación. No consumir”, puede leerse en la caja de las gominolas, según la imagen facilitada por la AESAN. “Los productos, a pesar de que incluyen una mención para que no se consuman, presentan la apariencia de alimentos, especialmente atractivos para los niños, y se han puesto a disposición de la población”, explica la Agencia en su comunicado.La segunda alerta fue publicada por el RASFF el pasado martes y hace referencia a otra marca de galletas y gominolas procedente de Países Bajos que contienen otro derivado del cannabis, el cannabidiol (CBD). El origen de la medida ha sido “la queja de un consumidor”. La gravedad de la alerta está pendiente de determinar y consta como “riesgo potencial”, y las investigaciones siguen en marcha. No consta que estos productos hayan causado alguna intoxicación.Un portavoz de la AESAN explica que, en este caso, las medidas adoptadas han sido “la retirada del mercado e información a las autoridades competentes para verificar la retirada”, pero en este caso la Agencia no ha publicado ningún comunicado. “A diferencia del HHC, el cannabidiol no tiene en principio un potencial psicotrópico relevante. El problema aquí es la gran dificultad en ocasiones de separarlo de otros componentes de la planta que sí los tienen”, precisa Salgado.La reglamentación aplicable en estos casos es europea y fue resumida en un documento conjunto del Ministerio de Sanidad y la AESAN, actualizado por última vez en junio de 2023. La normativa distingue entre aquellos productos sobre los que se ha podido acreditar un “historial de consumo seguro y significativo” en uno o más países de la UE antes de 1997 y que se puede consumir, por lo tanto, de forma legal. Algunos ejemplos son “alimentos o productos alimenticios procedentes de las semillas del cáñamo”, la variedad de la planta Cannabis sativa con concentraciones de THC menores al 0,3%. También “la infusión con agua de hojas de cáñamo (no unidas a las sumidades floridas) consumidas como tales o como parte de infusiones herbales”.Todos los demás artículos con cannabinoides, en cambio, se considera “que no han podido demostrar historial de consumo significativo ni seguro en la Unión Europea”, por lo que entran en una categoría denominada “nuevos alimentos”. En estos casos, las empresas que quieran venderlos en la UE deben solicitar una autorización a la Comisión Europea y su seguridad ser evaluada por la EFSA.Las galletas y gominolas con HHC y CBD entran en esta última categoría y la venta de alimentos que los contengan no está permitida en la UE. Según la AESAN, estas dos sustancias “tienen la consideración de nuevo alimento no autorizado y, por tanto, se ha ordenado su retirada del mercado”.José Juan Rodríguez, catedrático en Seguridad Alimentaria en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), destaca la peculiaridad de este tipo de productos. “Resulta difícil saber si son un producto alimenticio con un ingrediente especial o una droga que utiliza a un alimento como vía de administración. En cualquier caso, tienen riesgos, como se ha visto en este caso. La legislación europea está pensada para proteger al consumidor con evaluaciones previas exigentes para los nuevos alimentos. Con estos antecedentes, resulta difícil pensar que la EFSA pueda considerarlos seguros algún día”, concluye. Seguir leyendo