Fuente:
CIAL. Instituto de Investigación de Ciencias de la Alimentación
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La investigadora Marta Martínez Sanz, posa junto al presidente de la Academia Joven de España, Óscar Lucía Gil.
La investigadora Marta Martínez Sanz se ha incorporado como Académica de número a la Academia Joven de España, una institución que trabaja para visibilizar al personal investigador de referencia del país y fomentar las vocaciones científicas tempranas en todas las áreas de conocimiento.
En su discurso de toma de posesión, Martínez Sanz hizo un recorrido por su carrera, jalonada de reconocimientos como el Premio Nacional de Investigación para Jóvenes “Ángeles Alvariño” y el Premio de Investigación “Miguel Catalán”, en el que enfatizó la importancia de la internacionalización y la multidisciplinariedad. Es imposible disociar la primera de la trayectoria de la científica, que ha discurrido por varios países y tres continentes. La multidisciplinariedad fue todo un descubrimiento para ella, casi una revelación, cuando en su periodo posdoctoral se vio inmersa en el entorno de un reactor nuclear en ANSTO (Australia), estudiando la estructura de las paredes celulares vegetales con técnicas físicas avanzadas basadas en neutrones y rayos X.
Actualmente, la investigadora del Grupo de Proteínas Alimentarias desarrolla en el CIAL nuevos alimentos proteicos a partir de fuentes alternativas, estudia el comportamiento de estos alimentos durante la digestión gastrointestinal y diseña nuevos alimentos funcionales. También se preocupa por cerrar la brecha de género en las disciplinas científicas tradicionalmente masculinas, en comunicar a la sociedad cómo se investiga y los resultados que se obtienen, y en aportar soluciones a los retos alimentarios que está provocando el cambio climático. Todo ello sin perder de vista la importancia crucial que las nuevas generaciones tienen en el avance de la ciencia.
En una referencia al astrónomo y divulgador Carl Sagan, Martínez Sanz subrayó la importancia de fomentar las vocaciones científicas desde la infancia y el papel de las instituciones en preservar la que ya muestren. “Todos los niños nacen científicos por naturaleza, pero les vamos quitando esa capacidad. Solo unos pocos logran atravesar el sistema con su asombro y su entusiasmo intactos”, recordó la doctora en Ciencias de los Alimentos. Y añadió, en alusión a su propia carrera y la actividad que lleva a cabo en el CIAL: “Es imprescindible acercar la ciencia a los niños y niñas en sus edades más tempranas para que sepan que esa pasión puede convertirse en un camino profesional”. Eso sí, raramente puede predecirse este camino, puesto que “en la ciencia no hay metas fijas, siempre tenemos nuevas preguntas, nuevos retos y nuevas posibilidades, y eso es realmente lo bonito de esta profesión”.
Además, el pasado 25 de noviembre, Marta participó en el Solemne Acto de Imposición de Medallas de la Academia Joven de España. Durante el acto, tuvo el honor de pronunciar el discurso en representación de los/as nuevos Académicos, junto a la Académica Ana Valdivia. Puede verse el acto completo aquí.