Así es cómo se busca la vida Enusa para seguir viva tras el apagón nuclear en España

Fecha de publicación: 22/11/2024
Fuente: El Periódico de la Energía
Lugar: Eléctricas
La industria nuclear española vive una etapa crucial. Mientras el país se prepara para el cierre progresivo de sus centrales nucleares, pactado en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), Enusa Industrias Avanzadas, la empresa de referencia en la fabricación de combustible nuclear en España, busca nuevas formas de asegurar su supervivencia. Con una fuerte apuesta por la internacionalización y la diversificación, la fábrica de Enusa en Juzbado (Salamanca) se posiciona como un actor clave en un mercado que, aunque en transformación, sigue siendo esencial para la transición energética global.
Desde su apertura en 1985, la fábrica de Enusa ha producido más de 9.500 toneladas de combustible nuclear, con una capacidad actual de 500 toneladas anuales. Con clientes en mercados europeos clave, como Francia, Bélgica, Finlandia y Suecia, Enusa exporta ya el 60% de su producción, cifra que se espera crezca aún más con el declive del mercado doméstico, que comenzará a notarse entre 2026 y 2027.
En la actualidad, el 60% de la producción de Enusa ya se destina a la exportación, y se espera que esta cifra aumente en los próximos años. Francia, donde su principal cliente es EDF, representa una parte significativa del negocio internacional, pero la empresa también ha establecido relaciones sólidas con países como Bélgica, Finlandia, Suecia y Suiza.
Alternativas a Rusia
Uno de los grandes hitos recientes de Enusa es su participación en el Proyecto APIS (Programa Acelerado para la Implementación de Suministro Seguro de Combustible VVER). Este programa, financiado con 10 millones de euros por la Unión Europea a través de los fondos Next Generation, busca desarrollar una alternativa al combustible nuclear de diseño ruso, utilizado en más de 30 reactores en la UE y Ucrania. La invasión rusa a Ucrania ha acelerado los esfuerzos europeos por reducir la dependencia energética del país euroasiático.
Relacionado:España fabricará combustible nuclear para sustituir el ruso en los reactores VVER-440 europeos"Cuando comenzó la crisis de Ucrania, algunos países, como Finlandia y Suecia, se movieron rápidamente para buscar diseños alternativos de combustible", explica Vega. Enusa, que ya había fabricado combustible VVER-440 entre 2001 y 2007, ha retomado esta línea de producción con el objetivo de convertirse en el principal proveedor de los 16 reactores europeos que utilizan esta tecnología.
Sin embargo, no todos los países están dispuestos a abandonar el combustible ruso. "El producto ruso sigue siendo muy competitivo en precio y diseño, y si no hay presión estratégica, es difícil que algunos países, como Hungría, opten por un cambio", admite Vega.
Innovación y sostenibilidad
Además de explorar nuevos mercados, Enusa invierte en la modernización de su planta en Juzbado para reducir costos y aumentar la sostenibilidad. Entre las mejoras recientes destacan una planta fotovoltaica para autoconsumo, sistemas de ventilación avanzados en áreas cerámicas, y laboratorios de dosimetría interna para medir la exposición a radiación. Este último servicio, autorizado por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), no solo beneficiará a los trabajadores de Enusa, sino que también estará disponible para otras empresas del sector.
En total, la empresa ha invertido más de 45 millones de euros en mejoras desde su apertura, reforzando su posición como un referente en la fabricación de combustible nuclear en Europa.
Papel de España en el mercado global
En un momento en que la energía nuclear resurge como una opción para garantizar la soberanía energética y cumplir con objetivos de descarbonización, Enusa trabaja para expandir su presencia en mercados emergentes. Países como Polonia están explorando la construcción de nuevas centrales nucleares, mientras que regiones como Oriente Medio comienzan a interesarse por esta tecnología.
Relacionado:La nuclear española busca oportunidades en República ChecaEl desafío, sin embargo, radica en un mercado europeo con exceso de capacidad de producción de combustible, lo que obliga a las empresas a competir ferozmente por nuevos contratos. Enusa confía en su experiencia y en su tecnología propia para mantenerse relevante en este contexto.